En el camino hacia un estilo de vida más sostenible y minimalista, es esencial llevar esas elecciones conscientes a cada aspecto de nuestras vidas, incluida nuestra alimentación. En esta ocasión, te presentamos una receta que combina la sostenibilidad de ingredientes frescos con la simplicidad y la elegancia del minimalismo. Nuestra Tarta de Ciruelas no solo es una deliciosa indulgencia, sino también un reflejo de cómo podemos nutrirnos de manera responsable y saborear la belleza de la naturaleza en cada bocado.
Ingredientes:
Para la masa:
- ½ taza de copos de avena
- ½ taza de semillas de lino
- ½ taza de avellanas
- 5 dátiles, endulzantes naturales
- 3 higos, para una dulzura única
- 1 plátano maduro
- 2 cucharadas de agua, para la textura
Para la crema:
- 1 kg de ciruelas (recomendamos la variedad Claudia)
- 4 cucharadas de semillas de chía, una fuente de omega-3 y fibra
- Canela al gusto, para un toque cálido
- Nueces, para un crujiente nutritivo
Preparación:
Para la masa:
- Comienza triturando los ingredientes secos: copos de avena, semillas de lino y avellanas. Luego, colócalos en el molde que usarás para la tarta.
- Tritura los dátiles, higos y plátano hasta lograr una mezcla uniforme. Combina esta mezcla con los ingredientes secos ya triturados.
- Con tus manos, moldea esta mezcla en la base de la tarta, creando una base nutritiva y sabrosa.
Para la crema:
- Antes de sumergirte en la preparación de la crema, quita con cuidado las semillas de las ciruelas. Esto asegurará una textura suave y deliciosa en la crema.
- Utiliza un procesador o licuadora para triturar las ciruelas a la perfección, hasta obtener una consistencia sedosa.
- Agrega las 4 cucharadas de semillas de chía, que no solo agregan textura, sino también beneficios nutricionales.
- Añade un toque de canela, la cual no solo agrega sabor, sino también propiedades antiinflamatorias.
- Vierte esta mezcla sobre la base de tarta preparada previamente, y para un toque final, decora con nueces, añadiendo un contraste crujiente.
Esta Tarta de Ciruelas no es solo un placer para el paladar, sino también un ejemplo de cómo la sostenibilidad, el minimalismo y la nutrición pueden fusionarse en un solo plato. Al saborear esta deliciosa creación, no solo te nutres a ti mismo, sino que también honras nuestro compromiso con un mundo más sostenible y consciente.